En los pasillos de los ayuntamientos españoles, las discrepancias interpretativas sobre normativa y procedimientos son el pan de cada día. Técnicos, juristas e interventores se enfrentan constantemente a la necesidad de interpretar legislación compleja, a menudo ambigua, y aplicarla a casos concretos que rara vez encajan perfectamente en los supuestos contemplados por el legislador.

La revolución de la IA en la resolución de conflictos legales

«Muchas veces nos encontramos atascados en un expediente porque hay diferentes interpretaciones técnicas sobre un mismo artículo o porque no está claro qué normativa prevalece», explica un técnico de administración general de un ayuntamiento de tamaño medio.

Estas discrepancias interpretativas generan cuellos de botella administrativos que pueden retrasar durante meses la tramitación de expedientes, perjudicando tanto a la administración como a los ciudadanos y empresas que dependen de estas resoluciones.

Un árbitro imparcial basado en datos

La inteligencia artificial está emergiendo como una herramienta revolucionaria para abordar estos conflictos interpretativos. Los sistemas de IA pueden analizar en segundos miles de documentos jurídicos, desde legislación y jurisprudencia hasta dictámenes de juntas consultivas y resoluciones de tribunales administrativos, ofreciendo una visión comprehensiva que sería imposible para cualquier profesional humano.

«Ante una duda interpretativa, ahora podemos consultar a la IA, que nos proporciona un análisis jurídico completo, incluyendo normativa aplicable, jurisprudencia relevante y dictámenes de órganos consultivos. Esto nos permite tomar decisiones mejor fundamentadas y reducir el riesgo de recursos o impugnaciones», señala un secretario municipal.

Esta capacidad es particularmente valiosa en ámbitos como la contratación pública o la gestión urbanística, donde la complejidad normativa y la frecuencia de las modificaciones legislativas hacen especialmente difícil mantener un conocimiento actualizado y exhaustivo.

De la confrontación a la colaboración

Uno de los efectos más interesantes de la implementación de estas herramientas es el cambio que está provocando en la dinámica de resolución de conflictos dentro de la administración. Tradicionalmente, las discrepancias interpretativas podían derivar en pugnas entre departamentos o entre técnicos y cargos electos, cada uno defendiendo su interpretación desde posiciones a veces enrocadas.

La IA está permitiendo transformar estas dinámicas adversariales en procesos más colaborativos. Al ofrecer un análisis objetivo basado en datos, proporciona un terreno neutral desde el que abordar las discrepancias.

«Antes, cuando había una discrepancia con intervención o secretaría, podíamos pasarnos semanas intercambiando informes contradictorios. Ahora, utilizamos la IA como punto de partida común, lo que nos permite centrar la discusión en los aspectos realmente controvertidos y avanzar más rápidamente», explica un concejal de hacienda.

Fundamentación jurídica reforzada

Otro beneficio significativo es el refuerzo de la fundamentación jurídica de las decisiones administrativas. La IA permite a los técnicos municipales acceder instantáneamente a un corpus normativo y jurisprudencial que antes requería horas o días de investigación.

«Con la IA puedo incluir en mis informes referencias a sentencias recientes, a dictámenes de juntas consultivas o a interpretaciones doctrinales que antes, simplemente por falta de tiempo, no podía contemplar», explica una técnica jurídica municipal.

Esta mejora en la fundamentación jurídica no solo refuerza la seguridad jurídica de las decisiones administrativas, sino que reduce significativamente el riesgo de recursos y litigiosidad, con el consiguiente ahorro de tiempo y recursos para la administción.

Limitaciones y complementariedad con el criterio técnico

Pese a todas estas ventajas, los expertos coinciden en señalar que la IA tiene limitaciones importantes en este ámbito. La interpretación jurídica no es un proceso puramente lógico o deductivo, sino que implica también valoraciones normativas, consideraciones de política jurídica y una comprensión del contexto social y económico que, por el momento, está fuera del alcance de los sistemas automatizados.

«La IA es una herramienta fantástica, pero necesita el criterio del jurista para contextualizar y valorar adecuadamente la información que proporciona», matiza un técnico de administración general con experiencia en el uso de estas herramientas.

Por ello, el modelo que se está imponiendo en los ayuntamientos más avanzados es el de complementariedad: la IA proporciona información exhaustiva y sistematizada, pero la decisión final sigue recayendo en los profesionales humanos, que aportan el juicio contextual y la responsabilidad que toda decisión administrativa requiere.

Hacia una administración más ágil y jurídicamente sólida

La implementación de herramientas de IA para la resolución de conflictos interpretativos está contribuyendo a una administración local más ágil, coherente y jurídicamente sólida. Los expedientes se resuelven más rápidamente, con mejor fundamentación y menor riesgo de recursos.

El desafío ahora es extender estas buenas prácticas a todos los ayuntamientos, independientemente de su tamaño o recursos, para que los beneficios de esta revolución tecnológica lleguen a todo el tejido administrativo local y, por ende, a toda la ciudadanía.

Administración local e inteligencia artificial: experiencias desde el terreno

Los artículos que conforman esta serie han sido redactados por la Fundación Emprende tras un exhaustivo trabajo de campo con administraciones locales canarias. Este proyecto refleja, de forma ficcionada y anonimizada, conversaciones reales mantenidas con responsables políticos y técnicos de más de 50 ayuntamientos del archipiélago, preservando la confidencialidad mientras se exponen problemáticas auténticas del día a día municipal.

Lo más revelador del proceso ha sido constatar cómo, independientemente del tamaño del municipio o su ubicación, existen patrones comunes en los cuellos de botella administrativos y las oportunidades de mejora en la gestión pública local. Estos desafíos no son exclusivos de Canarias, sino que representan realidades extensibles a la gran mayoría de los municipios españoles, donde la inteligencia artificial emerge como una herramienta transformadora para lograr administraciones más ágiles, eficientes y cercanas al ciudadano.

Invitamos a todos los responsables municipales interesados en abordar estos retos en sus ayuntamientos a contactar con la Fundación Emprende. Desde 2023, venimos implantando con éxito Laboratorios de Innovación con IA en administraciones locales y promoviendo la adopción de estas soluciones a las necesidades específicas de cada municipio. No dude en escribirnos para explorar cómo podemos ayudarle a transformar su gestión municipal aprovechando el potencial de la inteligencia artificial para mejorar los servicios públicos y optimizar los recursos disponibles.